Los sembrados de piña abundan mucho por estos lares |
Allí, muy cerca de lo que pudiera considerarse el centro de la comunidad, vive Aracelio Miranda, fuerte a sus más de siete décadas, pese a no haber ido nunca al médico ni tomado medicamento alguno.
¿La razón? Él y su familia son fieles a una creencia surgida en Viñales desde la década del 30.